"Netflix es diferente. Es una cultura donde la regla es la ausencia de reglas".
Esta cita de Reed Hastings, CEO de Netflix, resume la filosofía de la compañía y el punto crítico que hace que el mundo de las startups y el espíritu empresarial mundial permanezca incrédulo. En un panorama global en el que las grandes empresas tienen reglas cada vez más estrictas y equiposrígidamente organizados, encontrarse con un gigante del mercado que justifica su éxito con la ausencia de reglas y control parece increíble.
La cultura interna de Netflix es tan poco común que en algunos casos parece ser brutal con los trabajadores. Por un lado, la ausencia de reglas dentro de una organización significa que no hay necesidad de aprobación por parte de los directivos para desarrollar proyectos con costos muy altos, que no existe una política de vacaciones predeterminada y los empleados pueden decidir cuánto y en qué gastar el dinero de la empresa. Por otro lado, como evidencia en su famoso Netflix Culture Deck, su manual de cultura corporativa, que dice: "A uno rendimiento adecuado, corresponde una generosa indemnización por despido", cuando el empleado no está en el punto más alto de su rendimiento, la empresa está autorizada a despedirle de inmediato con una generosa compensación.
Aunque la cultura en Netflix pueda parecer un paraíso porque quienes consiguen entrar pueden beneficiarse de vacaciones cuando lo consideren necesario, extrema libertad de decisión y salarios muy altos, al mismo tiempo los principios que deciden la idoneidad de los empleados son muy controvertidos: los empleados de Netflix tienen mayor autonomía y flexibilidad en su trabajo, pero también mayor responsabilidad y un riesgo de fracaso más alto. No es casualidad que esta cultura haya sido calificada como “darwiniana” porque premia a los empleados exitosos y despide a los que no logran los objetivos.
La principal crítica que este modelo recibe es que puede ser estresante para los empleados y fomentar un ambiente de trabajo competitivo y poco cooperativo, y que el sistema de despido rápido puede crear un clima de miedo e inseguridad: la misma Erin Meyer, coautora del libro, afirma que el método Netflix viola el llamado principio de "seguridad psicológica" teorizado por la profesora Amy Edmondson de la Harvard Business School, según el cual si se quiere incrementar la innovación en la empresa es necesario crear un ambiente seguro para los empleados.
Sin embargo, contra todo pronóstico, la cultura de Netflix parece estar funcionando. Según los partidarios -como por ejemplo el CEO Reed Hastings- el sistema de libertad y responsabilidad es fundamental para mejorar la capacidad de la empresa de innovar rápidamente y adaptarse a las necesidades cambiantes del mercado, y precisamente la cultura corporativa de Netflix es un factor clave de su éxito. Pero poner en práctica una política de libertad total de los empleados requiere precauciones y la preparación necesaria ya que no necesariamente funciona en cualquier empresa.