Muy a menudo las personas se dejan definir por los demás y se encuentran en un laberinto de suposiciones y de juicios que no corresponden a la realidad y las hace sentir impotentes. Conseguir liberarse de estos falsos límites significa obtener el éxito en todas esas cosas que parecen imposibles de conseguir. Para hacerlo, podemos seguir el "modelo sin límites"; cada vez que tenemos la percepción de vivir una vida diferente de la que deseamos, lo primero que tenemos que hacer es preguntarnos qué es lo que nos frena: ¿dónde está el obstáculo? Podría estar en nuestra actitud mental, o en nuestra motivación, o en nuestros métodos.
Seguramente no está en nuestro cerebro, ya que es la máquina más increíble que jamás se haya creado, apto para procesar los datos más rápido que cualquier computadora, con una memoria potencialmente ilimitada, capaz de cambiar según la situación externa y sobre todo teniendo en cuenta las exigencias de su “propietario”. Por ejemplo, según un estudio dirigido por la neurocientífica Eleanor Maguire del University College de Londres, los taxistas tienen un hipocampo —la parte de la corteza cerebral que se encarga de la memoria— más desarrollado que el de las personas de la misma edad, educación e inteligencia, pero que no conducen un taxi; es como si el cerebro de los taxistas se expandiera para facilitar el aprendizaje y el reconocimiento de cada callejuela de la ciudad.