La suma de las experiencias vividas en la infancia moldea el tipo de padres que llegaremos a ser. Aunque esta afirmación es cierta, no siempre existe una conexión sistemática y directa entre los episodios vividos por el padre o la madre durante su infancia y la forma en que criarán a sus propios hijos.
Puede ser el caso de un padre que experimentó eventos negativos en su infancia pero que no los ha procesado, perdiendo así la oportunidad de darles un significado más profundo. Esto es especialmente relevante cuando se trata de experiencias difíciles y traumáticas.
Quienes tuvieron un padre violento no necesariamente se convertirán en padres violentos solo porque ese sea el único modelo de crianza que conocieron. Darse la oportunidad de comprender la fuente de esa violencia, sin justificarla, puede ser útil para adoptar un estilo de crianza diferente con los propios hijos.
Además, comprender las causas de los eventos que marcaron la infancia es una herramienta valiosa para aceptar esa parte de la vida y desarrollar una nueva autoconsciencia.
La nueva tarea educativa de un padre es tan crucial que preguntas como "¿Qué causó esa violencia?" pueden encontrar respuestas importantes para apoyar un modelo de crianza que brinde seguridad a los niños.
El libro "Ser padres conscientes" tiene como objetivo ayudar a muchos padres que se encuentran atrapados en un patrón de crianza que no les pertenece, pero que es el resultado de la crianza recibida por parte de sus propios padres.
Profundizar en las causas de lo que les sucedió durante la infancia o la adolescencia es una oportunidad para mejorar, en primer lugar, como individuos y, por lo tanto, también como padres. Es la forma más saludable de enriquecer la empatía en la relación familiar y cultivar un sentido de apego, que es fundamental en los primeros años de vida de los hijos. Naturalmente, este sentimiento es igual de fundamental en la edad adulta.
Estudios realizados en más de diez mil personas, entre padres e hijos, pertenecientes a diferentes culturas y clases sociales, han demostrado estadísticamente la efectividad de esta tesis. El estilo educativo de los nuevos padres debe basarse precisamente en los errores que no tienen que repetir.