La sexualidad es un elemento fundamental en la definición de la personalidad de una mujer. Su yo sexual es el resultado de una amplia gama de factores biológicos, socioculturales y, sobre todo, de las numerosas experiencias acumuladas a lo largo de la vida. El conocimiento de uno mismo en términos sexuales permite vivir la sexualidad con una mayor serenidad, aceptando el propio cuerpo y construyendo relaciones de pareja más satisfactorias. Muchos trastornos o comportamientos disfuncionales relacionados con la esfera sexual son causados precisamente por una falta de consciencia de la propia historia de vida. La sexualidad es, de hecho, una dimensión compleja que no se limita a la búsqueda del placer, el disfrute durante el acto sexual o la obtención del orgasmo. La sexualidad se refiere al amor que una mujer siente por sí misma; su capacidad para invertir energía en relaciones satisfactorias, ya sean sentimentales o meramente sexuales, y basadas en el respeto mutuo; la serenidad para aceptar los cambios corporales y fisiológicos relacionados con el paso del tiempo y la claridad para enfrentar experiencias traumáticas y embarcarse en procesos terapéuticos para superar sus consecuencias.
Una sexualidad consciente es, por lo tanto, un aspecto crucial para el bienestar general de una mujer. Por esta razón, a lo largo del libro, los autores enfatizan en varias ocasiones la importancia de cuidarse a uno mismo así como la posibilidad de emprender una terapia sexual. Con frecuencia, algunos problemas están relacionados con experiencias reprimidas, no procesadas o subestimadas. Otras veces, dependen de un escaso conocimiento del propio cuerpo y de los mecanismos bioquímicos que regulan la sexualidad. En el caso de una relación de pareja, la causa puede ser la falta de comunicación. Hablar de sexo no siempre es sencillo, ya que es un tema históricamente difícil de abordar, marcado por tabúes y aún influenciado por prejuicios de género. Desarrollar una mayor autoconsciencia, repasando la propia historia sexual, es, por lo tanto, de vital importancia.