Startup Evolution Curve

Una startup es ante todo una empresa diseñada para crecer rápidamente. No basta con tener una idea innovadora basada en el uso de nuevas tecnologías e inversiones externas, la empresa también debe tener el crecimiento como su primer objetivo y la innovación como su trasfondo natural. La novedad puede estar en el producto que creamos, en la tecnología empleada, en el método de producción o en el modo de pago o financiación. Una startup es una organización que introduce lo nuevo en cualquier forma teniendo como imperativo el "crecimiento".

Normalmente, una startup deja de serlo cuando alcanza los 50 millones de dólares de facturación anual, si tiene más de 100 empleados o si su valor alcanza los 500 millones.

La curva evolutiva de una startup nos muestra el camino desde la idea inicial del negocio hasta la creación de una empresa rentable y escalable (y por lo tanto, capaz de expandirse potencialmente sin límites). El concepto de escalabilidad está vinculado al hecho de que el crecimiento de la empresa no implica un aumento proporcional de los riesgos, costos o de los recursos que se emplean. La curva evolutiva de una startup pasa por estas cinco fases:

• creación de un modelo de negocio y la evaluación de su viabilidad;
• hipótesis y experimentación para validar la idea;
• recaudación de fondos o fundraising (cómo financiar el modelo de negocio);
• lanzamiento del producto;
• el growth hacking (encontrar la estrategia de marketing más eficaz para aumentar el número de usuarios o clientes lo más rápido posible).