The Corporate Startup

En un mundo que está cambiando rápidamente solo las empresas que son capaces de responder al cambio pueden sobrevivir y prosperar. El reto que las empresas consolidadas tienen que afrontar es el desarrollo de nuevos productos para nuevos mercados, manteniendo al mismo tiempo la gestión del negocio principal. La innovación ya no puede verse como algo secundario. Aún así, la mayoría de las grandes empresas de éxito se focalizan en los productos que aportan altos beneficios —los llamados “productos cash cow” o de alta rentabilidad. Si una empresa está obteniendo grandes beneficios de estos productos puede que corra el riesgo de no ver las necesidades de innovación que conllevan los cambios tecnológicos, sociales y culturales. Además, para las empresas que cotizan en bolsa existen ulteriores presiones sobre los directivos para que satisfagan las expectativas de rentabilidad del mercado a corto plazo. Sin embargo, es demasiado simple aconsejar a las empresas consolidadas que se comporten como si fueran startups. Las grandes empresas no son startups y no deberían esforzarse para serlo. Por otra parte, ¡la aspiración de cualquier startup es convertirse en una empresa de éxito! Para una empresa consolidada la expectativa de comportarse como una startup no es realista por un simple motivo: el trabajo cotidiano de una empresa consolidada conlleva la gestión de una actividad que ya es exitosa y rentable, mientras que, generalmente, las startups pueden concentrarse en una idea innovadora sin la herencia de una empresa con años de ejercicio. Hoy en día, el verdadero reto para una gran empresa es el siguiente: ¿cómo comprometerse a mantener la rentabilidad actual, dedicando al mismo tiempo suficiente energía para la exploración e innovación para garantizarse una rentabilidad futura? El empresario Steve Blank define la separación que hay entre la investigación y la ejecución como la diferencia principal entre las startups y las grandes empresas. Una startup es una organización temporal cuyo objetivo es buscar un modelo de negocio sostenible y rentable, mientras que una empresa consolidada lleva a cabo principalmente un modelo de negocio afianzado que satisface las exigencias conocidas de segmentos de mercado conocidos. ¿Entonces cómo se puede salir de este callejón sin salida? Las grandes empresas deberían dejar de pensar y actuar como si fueran una única organización monolítica con un solo modelo de negocio, y en cambio adoptar un enfoque ecosistémico de sus actividades. Todas las empresas modernas deben basarse en un mix equilibrado de productos consolidados “cash cow” y nuevos productos en fase de desarrollo con modelos de negocio rentables. Esta capacidad de buscar y alcanzar la innovación durante la ejecución del propio modelo de negocio consolidado es la señal distintiva de una empresa “ambidiestra”, es decir excelente ya sea en la investigación que en la ejecución. Esta es la paradoja de la innovación.