¿Cuál es el secreto para hacer que un matrimonio dure mucho tiempo? John Gottman no tiene dudas: una profunda amistad entre la pareja. Este sentimiento permite generar un clima positivo de respeto mutuo. Una amistad sólida aclara las dudas, los rencores interiorizados, la irritación y el aburrimiento. En las parejas que cultivan este sentimiento no hay ganadores ni perdedores, ni tampoco deberes. No se hace algo a cambio de otra cosa, sino que se vive a la otra persona por lo que es. Una amistad profunda implica un conocimiento íntimo de la pareja. Ambos saben exactamente lo que le gusta o no al otro. Ambos conocen sus sueños y esperanzas, pero también sus problemas personales y esos pequeños puntos críticos que, si no se gestionan, pueden causar malestar en la pareja. En una relación que se basa en la amistad, el amor se transmite a través de pequeños gestos cotidianos, como dejar el último trozo de tarta al otro, o invitar a cenar a su familia aunque no tengamos ganas, porque sabemos que es importante para la otra persona. También puede ser pedir sushi para sorprenderla o enviarle un mensaje de texto después de una importante cita de negocios para saber cómo le fue. Todos estos pequeños gestos valen mucho más que las llamativas expresiones de amor de los días festivos, como los aniversarios o San Valentín, porque hacen que nuestra pareja sepa que puede contar con nosotros todos los días. Incluso cuando discutimos, la amistad actúa como aglutinante y nos permite arreglar la situación.
Las parejas que logran movilizar sentimientos positivos, basados en una comprensión mutua y profunda, experimentan lo que los autores definen como "sintonía". Este estado de equilibrio emocional permite que la pareja viva cada día de manera positiva y fortalezca su vínculo. Estar en la misma sintonía es una condición que se autoalimenta, ya que cuanto más la experimentamos, más perdura, lo que garantiza que la pareja tenga un futuro. Para que la sintonía se desarrolle, también se necesita confianza y compromiso. Parecen ser dos cosas obvias, pero muchas parejas las pasan por alto. Exactamente así es como nace el engaño. La traición no es solo física. Cualquier acción que no priorice el compromiso que hemos asumido con nuestra pareja es una forma de traición.