¿Charlie Munger? ¡Una paradoja!
¿Cómo logró convertirse en uno de los genios más grandes de los negocios? La respuesta está muy cerca del misterio, porque por mucho que tratemos de acercarnos a la verdad, Charlie Munger siempre escapa un poco, creando un aura de misterio indescifrable. Nació en el año 1924, cuando el rey de Wall Street era Bernard Baruch. En ese momento, cualquiera podía hacerse rico comprando acciones. Charlie Munger pasa su infancia inmerso en la lectura (los libros eran considerados la radio, la televisión y los videojuegos de esa época). Su padre era un abogado de negocios de alto rango, sus clientes eran ricos, una verdadera élite. El primer trabajo de Charlie Munger, después de la secundaria, fue en la tienda de comestibles de su abuelo, que, por cierto, hoy en día existe todavía. Aprendió a mantener la contabilidad, las relaciones con los clientes, la importancia de presentarse a tiempo al trabajo, a llevarse bien con las personas que trabajaban con él y, lo más importante, controlar la caja registradora, la parte más importante del negocio. La ciudad donde vivía Charlie Munger, Omaha, era una ciudad de inmigrantes, de hecho, fue a la escuela junto con los hijos de estas personas, de quienes aprendió la capacidad de trabajar con voluntad y amor para poder dar a sus hijos un futuro mejor. Durante las conferencias anuales en Berkshire Hathaway, Charlie Munger suele hablar a menudo de los altibajos emocionales de la Gran Depresión que Estados Unidos estaba viviendo en aquella época. Estos ejemplos siguen ayudándolo a que la audiencia tenga claro que hay que hacer frente a las diferentes situaciones de la vida. Sin embargo, tenemos también que contar la suerte que tuvo el lugar donde nació Charlie Munger: Era una ciudad que no sufrió mucho la depresión porque se encuentra geográficamente en un lugar estratégico. Esta ventaja permitió que está pequeña ciudad se convirtiera en el punto de contacto para la cría de ganado. Kiewit Construction Company (hoy en día una de las compañías más grandes de los EE. UU.) Comenzó a construir precisamente en Omaha los primeros edificios para el intercambio de ganado y Peter Kiewit ejerció una gran influencia en el joven Munger que en ese momento entendió cómo se movía el mundo de los negocios, y aplicó inmediatamente las reglas. En 1979 Charlie Munger se convirtió en el presidente de Berkshire Hathaways y hoy en día lo sigue siendo. A la venerable edad de 92 años, dirige una empresa que tiene una capitalización de mercado de 362 mil millones de dólares y también es el presidente de Daily Journal Corporation. Su riqueza personal está por encima de los 2 mil millones de dólares. "Charlie Munger sabe cómo invertir", dice su socio Warren Buffett. Este libro es un compendio de citas. Te mostrará una colección de entrevistas y discursos realizados con Charlie Munger durante las reuniones anuales de Berkshire Hathaway. Te revelará algunas pequeñas píldoras de sabiduría de un hombre que sabe tanto.