Unleashing the Ideavirus

Que una idea pueda ser contagiosa como un virus es un concepto sensato pero que, al mismo tiempo, va contra el instinto. Tiene sentido porque lo hemos experimentado en nosotros mismos, si piensas por ejemplo en el estribillo de una canción que no se nos va de la cabeza, pero va contra el instinto porque no se adapta a la visión tradicional del mundo de los expertos en marketing. Las ideas de éxito son las que crecen y se difunden gracias a las relaciones entre clientes, y no entre cliente y experto en marketing. El interruption marketing, es decir, el marketing de la interrupción, ya no es rentable porque no sirve de nada buscar clientes y enviar mensajes publicitarios indeseados esperando llamar la atención, sino que es necesario preparar una red de clientes, de manera que el producto, o aún mejor, la idea, se venda de un consumidor a otro. A pesar de que el poder del boca a boca se debilita y desaparece con el tiempo, nuestra era nos ha dotado de un estupendo medio de propagación conveniente y veloz para la ideavirus: la web.